Una ciudad que no cambia no es ciudad; ¿pero que tanto? ¿cómo? ¿Cada cuánto? ¿Cómo calcular o pensar el presente y futuro en ambientes de transformación y alteración permanente? ¿Hasta qué punto es una cualidad o un problema?
No se trata de ser catastrofista, pero la estabilidad sólo existe en las leyes del universo. Mantienen todo en su lugar, bajo un cierto control cíclico. Es todo aquello que está suspendido y a la espera de un ente externo que lo sacuda y lo fragmente. En cambio, nosotros somos, por naturaleza, seres inestables y sacudimos nuestros propios cimientos en busca de algo que nos saque de la normalidad. Empujamos los límites hasta sectores en donde dejamos de reconocernos. Somos cuerpos con motilidad, buscando adaptarnos a las diversas situaciones y realidades que componen al sistema cambiante y voluble en el que nos encontramos. Ante periodos poco estables, el ser humano busca dónde anclarse y con quién refugiarse. Lo indefinible se vuelve manejable únicamente después del cambio que la ambigüedad trae consigo.
No se trata de ser catastrofista, pero la estabilidad sólo existe en las leyes del universo. Mantienen todo en su lugar, bajo un cierto control cíclico. Es todo aquello que está suspendido y a la espera de un ente externo que lo sacuda y lo fragmente. En cambio, nosotros somos, por naturaleza, seres inestables y sacudimos nuestros propios cimientos en busca de algo que nos saque de la normalidad. Empujamos los límites hasta sectores en donde dejamos de reconocernos. Somos cuerpos con motilidad, buscando adaptarnos a las diversas situaciones y realidades que componen al sistema cambiante y voluble en el que nos encontramos. Ante periodos poco estables, el ser humano busca dónde anclarse y con quién refugiarse. Lo indefinible se vuelve manejable únicamente después del cambio que la ambigüedad trae consigo.